Recibir una empresa como parte de una herencia puede parecer una buena noticia, pero también puede implicar riesgos si la entidad arrastra deudas, conflictos societarios o pasivos ocultos. En estos casos, aceptar la herencia sin precauciones puede comprometer seriamente el patrimonio personal del heredero.

Según el Código Civil, artículo 1003, el heredero responde de las deudas hereditarias no solo con los bienes heredados, sino también con los suyos propios, salvo que acepte la herencia a beneficio de inventario. Este mecanismo, regulado entre los artículos 1010 y 1034, permite al heredero delimitar su responsabilidad, protegiendo su patrimonio personal frente a pasivos ocultos o deudas de la empresa.

Además, cuando se hereda una empresa en funcionamiento, es necesario considerar:

  • La situación fiscal y laboral. 
  • Las relaciones con socios o accionistas. 
  • Los contratos vigentes y la situación contable. 
  • Si existe algún litigio en curso.

Heredar una empresa: ¿qué pasos debo seguir?

También puede ser necesario tramitar el cambio de titularidad en el Registro Mercantil, asumir responsabilidades frente a proveedores o trabajadores, o incluso valorar la liquidación de la empresa si no resulta viable.

Por todo ello, es esencial realizar un análisis exhaustivo antes de aceptar la herencia. Contar con asesoramiento especializado permite tomar decisiones informadas, valorar la viabilidad de la empresa y planificar su gestión futura o su cierre ordenado.

En Legadosi3 ofrecemos un asesoramiento integral para herencias empresariales, combinando nuestra experiencia en derecho sucesorio con conocimientos en derecho mercantil. Si se enfrenta a una situación de este tipo, podemos ayudarle a proteger sus intereses.