La planificación sucesoria es una tarea crucial para garantizar que nuestros bienes se distribuyan como nosotros deseamos tras el fallecimiento. En este contexto, uno de los términos legales que suele surgir es la «preterición» en un testamento. Esta ocurre cuando un testador omite intencionalmente a un heredero legítimo en su testamento. Puede deberse a diversas razones, como cambios en las circunstancias familiares o simplemente preferencias por una u otra persona.

Sin embargo, la preterición puede tener consecuencias significativas si no se aborda adecuadamente. Por eso, y como siempre os aconsejamos, lo ideal es dejarse asesorar por un despacho de abogados, En el caso de Legadosi3, donde contamos con más de 15 años de experiencia, estamos especializados en herencias y litigios derivados de ellos, por lo que estaremos encantados de poder ayudarte. 

Preterición en el testamento: ¿Me han desheredado?

En el tema que nos ocupa, cuando un heredero es preterido, significa que no se le ha asignado ninguna porción de la herencia en el testamento. En muchas jurisdicciones, existen disposiciones legales para proteger a los herederos preteridos, asegurando que reciban una parte justa de la herencia.

La solución común para abordar la preterición es la aplicación de reglas de representación o herencia forzosa, que varían según la legislación local. Estas reglas buscan proteger los derechos de los herederos preteridos al asignarles una parte de la herencia, a menudo equivalente a lo que hubieran recibido si el testador hubiera considerado su existencia al redactar el testamento.

Es esencial comprender que la preterición no siempre resulta de malicia o intención de desheredar a alguien. En muchos casos, los cambios en la dinámica familiar pueden pasar desapercibidos al redactar un testamento, lo que destaca la importancia de revisar y actualizar regularmente estos documentos legales.