En un testamento solidario los bienes se legan a una o varias organizaciones sin ánimo de lucro. Es un tipo de testamento aún minoritario en España. Sin embargo, según datos del Consejo General del Notariado, este tipo de testamento suscitó un incremento en el interés de la ciudadanía, sobre todo durante los meses más duros de la crisis sanitaria.

Organizaciones como Unicef, Save the Children o Acnur abogan en sus campañas por incentivar este tipo de testamentos, que benefician a las personas más necesitadas. Hay varias fórmulas, como recuerdan desde Amnistía Internacional, para llevar a cabo un testamento solidario. Antes de iniciar los trámites, es aconsejable acudir a especialistas en derecho para que puedan ayudarnos con las posibles dudas que surjan durante el proceso. En el caso de Legados i3 puedes consultarnos a través del teléfono que aparece en esta web o en las distintas redes sociales (Facebook, Instagram y LinkedIn).

Testamento solidario: tres supuestos

Así, en caso de decidir llevar a cabo un testamento solidario, podemos encontrarnos ante tres supuestos. El primero de ellos es que no tengamos herederos a quien legar nuestro patrimonio. Por ello, si estamos interesados, podremos dejar todos nuestros bienes a la organización que elijamos. 

Si, además de una organización queremos repartir nuestro patrimonio entre varias, o entre varias personas y una o varias organizaciones, también podremos especificarlo en el testamento. En el caso de que existan personas herederas universales siempre se tendrá que respetar su cuota mínima legítima.

En última instancia, es posible realizar una donación de un bien concreto a través de un legado. De esta manera, cederemos una determinada cantidad dinero, un porcentaje sobre el valor del patrimonio o una propiedad a una o varias organizaciones seleccionadas. En todos los casos, será esencial incluir en el testamento los datos legales del proyecto, fundación u ONG a la que queremos legar parte (o todo) nuestro patrimonio. Así mismo, suele ser recomendable comunicar a la organización elegida la elección de colaborar con ella para que puedan gestionar el legado en un futuro. 

¿Qué tipos de testamento puedo hacer?

Si has decidido legar tus bienes, o al menos una parte de ellos, a una causa solidaria, has de conocer que, de manera general, existen tres tipos de testamentos que puedes llevar a cabo: el ológrafo, abierto y cerrado. El abierto, es el más utilizado. Debe hacerse ante notario, de modo que este redacte el testamento según los deseos del testador. Y debe reflejar, además el lugar, fecha y hora en que se produce. 

El ológrafo es aquel escrito por el propio testador. Para aceptar su validez debe estar escrito íntegramente a mano por el testador (no están permitidos los escritos a ordenador) y debe estar firmado por él. 

Y, por último, el testamento cerrado, el cual se entrega al notario sellado para que no pueda ser visto antes del fallecimiento del testador. Ha de indicarse al notario sus características (si está escrito a mano o a ordenador), momento tras el cual el notario dará constancia de su existencia.