Cuando una familia se encuentra ante una herencia, surgen cuestionamientos cruciales. Uno de los escenarios más complejos se da cuando se lega una propiedad a varios herederos, y algunos de ellos quieren realizar su venta mientras que el resto de herederos se posicionan en contra. Antes de explorar los desafíos relacionados con la venta de una propiedad heredada, es necesario contar con ciertos conocimientos sobre las obligaciones y también los derechos a los que accede un heredero por el hecho de serlo. Como siempre os recomendamos, lo ideal en un proceso de esta envergadura es contar con el asesoramiento legal de profesionales. En el caso de Legadosi3 contamos con más de 15 años de experiencia que respaldan nuestro oficio. Si deseas contactar con nosotros, encontrarás en la parte inferior de esta web nuestro teléfono, correo electrónico y redes sociales. 

Como decíamos, es vital conocer las obligaciones a las que está sometido un heredero por el hecho de serlo, como es la necesidad de llegar a un consenso sobre el futuro de, en el caso tratado, el inmueble heredado. En estos casos contar con una buena comunicación y una negociación transparente, llevada a cabo por profesionales, puede ahorrarnos muchos quebraderos de cabeza. Así, los herederos deben esforzarse por comprender las motivaciones detrás de aquellos que desean conservar la casa y aquellos que prefieren venderla. Buscar puntos en común y explorar soluciones alternativas puede ser beneficioso para todas las partes involucradas.

En estos casos, una de las alternativas más sencillas es que los herederos puedan llegar a un acuerdo de transacción entre sí. Será necesario para ello contar con un documento legal que establecerá los términos y condiciones de la transacción, permitiendo que aquellos que deseen vender cedan la parte de la propiedad que les es legítima a los herederos que optan por retenerla. 

Si el acuerdo resulta inalcanzable, los herederos pueden recurrir a recursos legales para resolver la disputa. Un tribunal podría intervenir para tomar decisiones sobre la división de la propiedad o, en casos extremos, ordenar la venta de la casa. En este sentido, los aspectos financieros también requieren una consideración rigurosa. Una evaluación profesional de la propiedad puede proporcionar una comprensión clara de su valor de mercado actual, influyendo en las decisiones de los herederos.