Un fideicomiso testamentario es, según la RAE, una disposición por la cual el testador deja deja su hacienda o parte de ella encomendada a la buena fe de alguien para que, en caso y tiempo determinados, la transmita a otra persona o la invierta del modo que se le señala.
De esta manera, el testador nombra a otra persona para administrar sus bienes que, en último lugar, habrá de entregar al beneficiario último. Como siempre señalamos, a la hora de gestionar cualquier trámite relacionado con una herencia, es recomendable acudir a un despacho especializado. En el caso de Legadosi3, más de 15 años de experiencia nos avalan en la resolución de estas cuestiones.
¿Qué términos debo conocer?
En la ecuación del fideicomiso tenemos tres figuras, por un lado la del fideicomitente, que es la persona que aporta los bienes (eltestador). La segunda figura es la del fiduciario o heredero fiduciario, que será el encargado de gestionar los bienes hasta su destino final. Por último, encontramos al fideicomisario o heredero fideicomisario, que será el heredero final.
Tipos de fideicomiso
Las sustituciones fideicomisarias en cuya virtud se encarga al heredero que conserve y transmita a un tercero eltodo o parte de la herencia, serán válidas y surtirán efecto siempre que no pasen del segundo grado, o que se hagan en favor de personas que vivan al tiempo delfallecimiento deltestador.
art 781 cc
La principal utilidad del fideicomiso es la de establecer sustento jurídico para la asignación de determinados beneficios (económicos) derivados de la transmisión de bienes en una herencia. Pero no hay ni una única utilidad ni un único tipo de fideicomiso, que puede ser condicional o a plazo. Si se trata de un fideicomiso
condicional, eltestador impone una condición que, en caso de darse, activa la obligación de transmisión de los bienes y derechos. En el caso de ‘a plazo’, la condición es un tiempo determinado en eltestamento.
¿Está obligado el fiduciario a entregar los bienes?
Sí. El fiduciario se compromete a entregar los bienes al fideicomisario una vez llegado el momento oportuno. Ello se debe a que, a la hora de aceptar la herencia, el fiduciario se compromete a la doble responsabilidad de conservar y transmitir el patrimonio.
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